Transformarnos para afrontar un futuro seguro y sostenible
No estamos bien preparados para afrontar los riesgos geopolíticos y la evolución del mundo digital, mientras el territorio se desmorona
Termina el segundo año de la era Covid y comienza el segundo año de guerra, de una maldita guerra, a las puertas de nuestra Europa que destruye vidas, ciudades, economías, energías. Hemos resistido, lo hemos logrado, hemos sido resilientes, hemos vuelto al centro de Europa, creciendo más que nuestros antagonistas aliados Francia y Alemania, y estamos soportando el aumento de la inflación y de las materias primas, pero ¿hasta cuándo? Estamos a salvo?
Solo nos estamos acostumbrando a sobrevivir, hemos estado trabajando durante mucho tiempo bajo tensión, sin estrategia, reducimos los daños, contenemos las pérdidas, las empresas reaccionan y de vez en cuando alguien cae. No estamos bien preparados para afrontar los riesgos geopolíticos y las evoluciones del mundo digital, mientras el territorio se desmorona como consecuencia de los cambios climáticos. Las dimensiones en las que se basa nuestro mundo digital y global contienen nuevos riesgos que también insisten en equilibrios geopolíticos.
Los datos que damos libremente para disfrutar de servicios de conveniencia, utilidades, nuestras innumerables aplicaciones o los innumerables escaparates de la nueva sociedad a través de la cual actuamos y que creemos inofensivos, solo necesarios para las oportunidades de negocio de servicios, nos condicionan y nos someten a nuevas estrategias de control, a nuevos riesgos.
El uso "político" de las redes sociales genera confusión
El uso "político" de las redes sociales genera confusión, incertidumbre, un escaparate de imágenes por estar muy a menudo sin contenido.
Es necesario transformarse, ya no reaccionar, no perseguir el social del momento, sino actuar, emprender no esperar, la espera nos hace inseguros, pasivos, consume nuestras últimas energías. Es necesario poner en seguridad al país, a las empresas, con una visión de conjunto estratégica y dejar a la táctica el movimiento hacia los objetivos a corto plazo.
Es necesario avanzar hacia agregaciones que creen valor estratégico e industrial nueva cultura de los servicios, que sirvan de motor para cambiar, posicionarse sobre productos y servicios de alto valor añadido.
Transformarnos para aprovechar oportunidades este es el momento, hacer inversiones, necesitamos capitanes valientes para las empresas, para el país, que pongan en el centro lógicas políticas e industriales a largo plazo para transformarnos hacia un futuro seguro y sostenible.
Giuseppe Calabrese, CEO Secursat